Papandreu ha dicho que va a convocar un referéndum para que los griegos puedan decidir sobre el segundo rescate y la quita del 50% de su deuda.
No se si será positivo o negativo, en todo caso en este país nació la democracia, así que igual es bueno volver a los orígenes y que sean los ciudadanos los que decidan entre lo malo y lo peor. Porque en realidad no hay muchas más alternativas.
Y, como es habitual, la oposición está en contra y dicen que el primer ministro tira una moneda al aire. Y lo dicen todos esos diputados que han estado callados o directamente implicados en toda la corrupción y la incompetencia de los últimos años, que es lo que ha llevado a Grecia a su situación actual. Mientras, ellos y todos sus amigos, allegados y "clientes políticos" siguen con los bolsillos bien llenos y con jugosas cuentas en el extranjero.
Pero seamos positivos, puede que por fin se consigan reformas de verdad. Pueden empezar por el sistema fiscal, seguir con el tema de la iglesia ortodoxa (primer terrateniente del país y que no solo no paga impuestos, sino que los sacerdotes son funcionarios a sueldo del estado), la economía sumergida que alcanza proporciones descomunales...