Valencia. La gran mascletà

Un fin de semana tranquilito. O eso pesaba yo. Valencia en carnaval, antes de las Fallas... tranquilito. Y resulta que hemos llegado justo cuando se celebraba la primera mascletà vertical de Valencia, hasta nueve veces más potente que las tradicionales de la Plaza del Ayuntamiento. Increíble.

Llegamos dos horas antes y pudimos colocarnos tras las vallas, en primera fila. A mi lado una señora valenciana me fue contando los detalles de las mascletàs y me recomendó que no me tapaba los oídos, que era peor.

Pero el día había empezado en la Catedral de Santa María o la Seu. Nuestro apartamento está muy cerca, podemos oír las campañas de la Torre perfectamente. Con la entrada dan una audioguía. Me ha gustado, sobre todo las partes que se conservan de estilo gótico. 

La Seu data del siglo XIII y se levantó en el lugar que ocupaba la antigua mezquita de Balansiya, alzada a su vez sobre la catedral visigótica que se construyó sobre un antiguo templo romano...

Contiene algunas de las mejores pinturas de Quattrocento en España, así como dos cuadros de Goya dedicados a san Francisco de Borja.

Después hemos visto el Museo Catedralicio en el que se exponen una Custodia, varios relicarios y reliquias de santos y mártires, ropajes... Sin embargo la mayor parte de las piezas de oro, plata o piedras preciosas fueron expoliadas por los franceses durante la invasión napoleónica.

Desde el Museo pasamos a la Capilla del Santo Cáliz, originalmente sala capitular de estilo gótico florido. Tiene una preciosa bóveda y un espectacular retablo tallado en alabastro que sirve de marco al Santo Cáliz que muchos identifican con el famoso Grial o copa usada por Jesucristo en la Última Cena

Por último subimos a la Torre, el Micalet, gótico valenciano, con cuatro cuerpos y 203 escalones de piedra. La primera parte de la escalera de caracol es algo más ancha pero luego se estrecha bastante y resulta complicado al encontrarse con gente en sentido contrario. Desde arriba había unas buenas vistas del centro de Valencia y un sol espléndido.

Atravesamos la Plaza de la Reina, una de las principales de Valencia y centro neurálgico de la ciudad antigua y nos dirigimos al Mercado Central.

El Mercado Central de Valencia es precioso. De estilo modernista, forma un bonito conjunto con La gótica Lonja de la Seda  y la Iglesia de los Santos Juanes. Los puestos están muy cuidados y limpios. En los de fruta vendían vasos de zumos de frutas por un euro y estaban buenísimos. Fresa, naranja, piña, maracuyá, mango, kiwi, coco... Daban ganas de probar todos.

Y lo mismo pasaba con el resto de la comida que vendían. Al final hemos comido allí: unas empanadillas de carne y espinacas y unos enormes vasos de trozos de fruta, el mío de piña y fresones.

Pensábamos ir a la Lonja de la Seda, que esta enfrente, en la misma Plaza del Mercado, pero hemos oído a unas chicas que el domingo es gratis y lo hemos dejado para mañana.

Hemos tomado unos helados en la Plaza del Ayuntamiento y seguido paseando por la Carrer de les Barques y la de Don Juan de Austria, viendo tiendas e incluso haciendo algunas compras.

Llegamos hasta el Mercado Colón donde paramos a tomar el café. Se trata de un precioso edificio modernista de principios del siglo XX. En él destacan las columnas de hierro fundido y la decoración en cerámica polícroma. En la actualidad y tras ser restaurado en 2003, alberga diversos negocios de hostelería como cafés, cervecerías o una horchatería. Es un lugar lleno de encanto e ideal para descansar y recargar las pilas.

Después del descanso paseamos por el antiguo cauce del Turia, desviado del centro de la ciudad por las grandes riadas que provocaba y hoy convertido en un precioso parque,  el Jardín del Turia. 

Allí está el Palau de la Música y más allá, al final casi de los jardines, la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Ideada en su mayor parte por el arquitecto Calatrava, su diseño moderno es espectacular y atrae mucho turismo, aunque no han faltado las polémicas sobre la calidad de las construcciones en los últimos años.

La Ciudad de las Artes y las Ciencias está formada por seis complejos: el Palau de les Arts Reina Sofía, dedicado a las artes escénicas y la ópera, el Hemisféric, con un cine Imax y Planetarium, el Museu de les Ciencies Príncipe Felipe, el Umbracle, el Ágora y el Oceanográfic.

Justo enfrente del Oceanográfic cogimos el autobús 95 hasta la parada del Pont d'Aragó y paseamos un poquito por el parque, por la zona del Puente del Mar y atravesando después el Pont de l'Exposició hasta la Alameda donde estaba todo preparado para la mascletà...

Había miles y miles de personas a la vuelta. Conseguimos llegar al centro y al apartamento en estado de coma... Como de costumbre nos habíamos pasado, caminando muchos kilómetros...