Ya habíamos estado antes en Ribadeo pero hoy nos han aconsejado hacer el paseo de unos 2,5 km que hay desde el puerto deportivo, pasando por la playa de Cargadeiro, el fuerte de San Damián, Peña Furada y hasta la isla Pancha, donde está el faro.
En realidad es un tramo del Camino Natural de la Ruta del Cantábrico que en su primera etapa en la provincia de Lugo tiene 21 km en total y que comienza en la Plaza de España de Ribadeo y continua pasando por Rinlo hasta la Playa De Las Catedrales.
Desde el puerto deportivo pasamos bajo el puente que cruza la ria y seguimos paseando hasta llegar a O Cargadoiro, un antiguo cargadero de mercancías que hoy está acondicionado como mirador.
Poco más adelante llegamos al Fuerte de San Damián, una fortaleza construida a principios del siglo XVII por el Marqués de Cerralbo y cuya misión era defender la entrada de la ria de posibles ataques desde el mar, como el que se produjo en 1719, cuando los ingleses atacaron y destruyeron el fuerte. Tras varias restauraciones hoy funciona como sala de exposiciones del Ayuntamiento de Ribadeo.
Continuamos caminando bajo los árboles un breve tramo hasta salir a la carretera que lleva al Faro bordeando la costa y dejándonos ver una bonita panorámica. Aquí se encuentra Peña Furada, un arco natural formado por la erosión del mar.
Y así llegamos hasta el puente que une la costa con Isla Pancha y que está cerrado. Prohibido pasar. Isla Pancha es un islote situado en la desembocadura del rio Eo, de apenas una hectárea de superficie y en el que se encuentran dos faros. En el más antiguo ha abierto un hotelito con dos habitaciones, en lo que fue la antigua residencia del farero
Las vistas en esta zona son impresionantes y nos han llevado, bordeando los acantilados hasta la Playa de Rocas Blancas, una cala resguardada, de fina arena blanca, con unas increíbles aguas azul marino y turquesa y poco más de 200 metros de longitud.
En realidad es un tramo del Camino Natural de la Ruta del Cantábrico que en su primera etapa en la provincia de Lugo tiene 21 km en total y que comienza en la Plaza de España de Ribadeo y continua pasando por Rinlo hasta la Playa De Las Catedrales.
Desde el puerto deportivo pasamos bajo el puente que cruza la ria y seguimos paseando hasta llegar a O Cargadoiro, un antiguo cargadero de mercancías que hoy está acondicionado como mirador.
Poco más adelante llegamos al Fuerte de San Damián, una fortaleza construida a principios del siglo XVII por el Marqués de Cerralbo y cuya misión era defender la entrada de la ria de posibles ataques desde el mar, como el que se produjo en 1719, cuando los ingleses atacaron y destruyeron el fuerte. Tras varias restauraciones hoy funciona como sala de exposiciones del Ayuntamiento de Ribadeo.
Continuamos caminando bajo los árboles un breve tramo hasta salir a la carretera que lleva al Faro bordeando la costa y dejándonos ver una bonita panorámica. Aquí se encuentra Peña Furada, un arco natural formado por la erosión del mar.
Y así llegamos hasta el puente que une la costa con Isla Pancha y que está cerrado. Prohibido pasar. Isla Pancha es un islote situado en la desembocadura del rio Eo, de apenas una hectárea de superficie y en el que se encuentran dos faros. En el más antiguo ha abierto un hotelito con dos habitaciones, en lo que fue la antigua residencia del farero
Las vistas en esta zona son impresionantes y nos han llevado, bordeando los acantilados hasta la Playa de Rocas Blancas, una cala resguardada, de fina arena blanca, con unas increíbles aguas azul marino y turquesa y poco más de 200 metros de longitud.
A comer, a las cuatro de la tarde, hemos ido a Rinlo donde habíamos encargado un arroz con marisco (bogavante sobre todo) en un conocido restaurante.
Rinlo es un pueblo de fuerte carácter marinero que dicen que tiene más de 5 siglos de antigüedad y que en sus orígenes fue un puerto ballenero. Aunque pertenece al Concello de Ribadeo, su Cofradía de pescadores es la segunda más antigua de España y se lo conoce como el lugar donde mejores mariscos se crían de la costa Cantábrica.
Hemos vuelto pronto al hotel, Finca Goleta, y descansado en el jardín, junto al rio Masma, que forma la ria de Foz. Otro lugar ideal para ver el atardecer con buena compañía.
2 comentarios:
Espero que el arroz con bogavante estuviera de muerte!
Sabes qué? me enamoro de ti.
:-)*
Neutrina
Buenísimo ;)
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