lunes, 18 de julio de 2016

USA: Hacia la Costa Oeste de Estados Unidos

Hoy salimos para EEUU y la verdad es que desde el principio ha habido problemas. Empezaron cuando el mayorista nos cambió todos los hoteles, si o si. No me sirvió de nada reclamar, se guardan muy bien las espaldas.
Después, y a diez días exactos del viaje, me operan de urgencia de una apendicitis. Yo pensé en anular, pero la cirugía fue por laparoscopia, todo iba bien y no había complicaciones. Decidí arriesgarme. Así que ayer me quitaban la últimas grapas y hoy de viaje.
Pero los problemas han seguido. Esta mañana llamo un taxi para ir a la estación de autobuses y tarda... Llamó a la central a ver que pasaba y que no encontraban ninguno pero que ya iba...
Resultado: he perdido el bus que me tenía que llevar al aeropuerto. Mi cara debía ser un poema cuando he llegado a la estación y he visto que ya había marchado. 
He tenido la inmensa suerte de que salía otro casi seguido y le quedaban plazas vacías. Voy a tardar más en llegar porque va parando en todos los pueblos, pero...
Por fin no ha sido mucho más tarde cuando he llegado al aeropuerto. Y allí han seguido las (malas) sorpresas. Overbooking. Primero en la web de la aerolínea no me dejan hacer el check- in on lince y luego, en el aeropuerto, me dicen que claro, que no llevaba asiento cogido. Se ha resuelto porque teníamos conexión en Washington y supongo que no tenían ganas de indemnizarnos por dos vuelos. Pero cada asiento en una punta del avión. Aunque a mí me ha tocado la salida de emergencia,


Ocho horas y pico de vuelo dan para mucho, comer, dormir, comer, ver una peli, comer, ver otra peli...
La azafata que llevaba nuestra zona hablaba algo de español, así que no he tenido que esforzarme mucho. ¡Lo primero que me dijo fue que le gustaban mucho mis zapatillas!
Aunque era un vuelo con conexión y el equipaje estaba facturado con destino Los Ángeles, en Washington te hacen retirar la maleta de la cinta y volver a dejarla en otra para que suba al siguiente avión. Pero íbamos tan pillados de tiempo que hemos tenido que ir a la carrera. Menos mal que los de inmigración una vez más hablaban perfectamente español y no se han puesto pesados con el interrogatorio. 
Aún así pasamos un control policial más, esta vez con escaner y después nos han cambiado los asientos. Por lo menos ahora vamos juntos y en fila 8.


Justo cuando ya íbamos a despegar se ha preparado una buena tormenta y ha empezado a llover un montón, lo que ha hecho que estuviéramos esperando dentro del avión casi otra hora.
Cinco horas más de viaje hasta Los Ángeles. Pero como hay una diferencia horaria de menos nueve horas con Madrid, después de pasar todo el día de viaje todavía llegamos pronto...
El aeropuerto LAX me ha sorprendido mucho. No se, pero esperaba que fuese más grande y estuviese más organizado. Pero entre que había obras y que las cintas están ya fuera, con entrada desde la calle y que puede acceder cualquiera a ellas...
Al llegar al hotel hemos cenado algo y a las 10 estábamos durmiendo.

No hay comentarios: